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Se ha trabajado mucho para ampliar la percepción pública de los trastornos alimenticios como algo que afecta a más personas además de las mujeres con cuerpos delgados. Sin embargo, es necesario crear más conciencia sobre la mayor prevalencia de los trastornos alimenticios entre la comunidad LGBTQ+.
La directora clínica de Rogers en Skokie, Katya Viswanadhan, PsyD, señala que, debido a las experiencias de marginación y de estrés crónico, los miembros de la comunidad LGBTQ+ tienen un mayor riesgo de desarrollar trastornos alimenticios y otros problemas de salud mental. Las personas que se identifican como trans o no binarias, en particular, pueden tener una mayor tasa de trastornos alimenticios y sus experiencias con los trastornos alimenticios son únicas.
"El cuerpo se vuelve en el punto de atención de muchas personas con problemas de identidad de género, frecuentemente debido a las expectativas y los estereotipos de la sociedad en cuanto al género", señala la Dra. Viswanadhan. "La búsqueda del cuerpo ideal puede generar obsesiones o preocupaciones sobre la imagen corporal, comportamientos compensatorios y un estado de ánimo negativo. Por lo tanto, nuestra responsabilidad social y ética es validar y mejorar las experiencias que viven las personas marginadas con falta de representación y aceptación".
La Dra. Viswanadhan dice que la forma en que hablamos sobre los trastornos alimenticios es importante. Al igual como no queremos usar un lenguaje orientado al género femenino para abordar el tema con ellos, también deberemos evitar hablar de ellos como un trastorno exclusivamente masculino y femenino.
"El lenguaje influye en la forma en que los individuos de una sociedad internalizan y retienen los mensajes que hablan sobre ellos mismos", señala la Dra. Viswanadhan. "Esto es especialmente cierto y dañino para aquellas personas que se identifican con algún género no binario".
La Dra. Viswanadha agrega que "para las personas que se identifican como transgénero y no binarias es mucho más complicado acceder a la atención médica y de salud mental debido a que los sistemas no reconocen formalmente sus identidades de género".
Una de las principales características de nuestra atención en Rogers es crear un plan de tratamiento que aborde lo que cada paciente está experimentando en vez de utilizar una terapia con un enfoque de talla única. Esto quiere decir que el equipo de tratamiento y el paciente deben crear un plan de atención que considere las experiencias únicas que tiene un miembro de la comunidad LGBTQ+.
"Es esencial que los profesionales de salud mental y las comunidades de atención médica estén capacitados para brindar atención centrada en el género, debido a que la identidad de género o la sexualidad de una persona puede influir en su experiencia de los síntomas de salud mental", señala la Dra. Viswanadhan.
También señalan que los médicos que atienden a las personas trans y no binarias deben saber que las fluctuaciones en la identidad y las expresiones de género son normales. La Dra. Viswanadhan también aconseja que "el paciente es quien debe liderar las conversaciones sobre su estado LGBTQ+ para garantizar que el tratamiento sea clínicamente afirmativo y apropiado".
Además, otros indicadores de identidad como la raza, la etnicidad, la religión, el estatus socioeconómico y el estado de discapacidad "se superponen e interactúan con la identidad LGBTQ+ de formas cruciales". Por ejemplo, las mujeres trans de raza negra se ven desproporcionalmente afectadas por la violencia debido a los prejuicios y la discriminación hacia sus identidades interseccionales.
"Reconocer que hay variaciones dentro de la comunidad resalta las complejidades de mantener varias identidades marginadas", ellos señalan.
Rogers ofrece atención hospitalaria, residencial y ambulatoria para niños, adolescentes y adultos que sufran de trastorno alimenticio en una creciente cantidad de filiales en todo el país. Si desea saber más sobre los trastornos alimenticios, consulte nuestra página de datos breves para obtener más información. Si usted o un ser querido está pasando por dificultades, llame al 800-767-4411 para programar una evaluación gratuita y confidencial o solicite una evaluación en línea.
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